Portugal no denunciará a Carvalho ante la UEFA.

La Federación Portuguesa de Fútbol ha decidido no denunciar a Carvalho ante la UEFA y sancionar al jugador del Real Madrid a nivel interno. Por lo tanto, el conjunto blanco no se verá salpicado por la polémica que el jugador está arrastrando con su selección.

Y es que, si el ente federativo hubiera considerado llevar el caso ante el máximo organismo del fútbol continental, el defensa se podría haber perdido algún partido de la Liga de Campeones. Finalmente no será así y la sanción se quedará en el seno del combinado luso.

Además, la Asociación de Futbolistas Portugueses que preside Joao Pinto va a intentar suavizar la situación y que se produzca un encuentro entre Paulo Bento y el propio Carvalho. Bento ya pidió a la Federación que no denunciara al jugador ante la UEFA y ahora están intentando que haya un acercamiento entre dos pesos pesados del fútbol portugués.

El seleccionador concederá hoy una entrevista a la televisión portuguesa y de sus palabras se podrá desprender si hay alguna posibilidad para que ambos acerquen posturas. Todo lo sucedido ha supuesto un terremoto en Portugal y, con la Eurocopa a la vuelta de la esquina, se busca un gesto que lleve todo a buen puerto.

Mou, clave en todo momento
Una de las piezas clave desde que se supiera la noticia ha sido José Mourinho. El mánager del Real Madrid, desde la distancia, ha seguido minuto a minuto todo lo que pasaba entre su pupilo y Paulo Bento, con el que guarda una gran relación.

Mou habló con ambos cuando se produjo todo el revuelo y ha llamado a diario a Carvalho para conocer de primera mano cómo se encontraba, pues es una de las piezas clave en el equipo. Las conversaciones entre los dos han supuesto un apoyo muy importante para el defensa, que necesitaba los consejos de una de las personas que más le conoce.

Ayer, Carvalho volvió a entrenarse con sus compañeros en Valdebebas y charló con su técnico antes de la sesión. Mourinho quiere lo mejor para Carvalho y también, por supuesto, para el fútbol portugués. No será la última vez que echen mano de él, el mayor referente del fútbol de su país, para solucionar el tema.