miércoles, 1 de junio de 2011

“Jugar en Segunda División es el objetivo que tiene que marcarse el Castilla y se puede conseguir”, añadió el técnico blanco

El Real Madrid Castilla finalizó el pasado fin de semana su sueño del ascenso a Segunda División tras caer ante el Alcoyano en la primera eliminatoria del playoff. Una vez concluida la temporada el entrenador, Alberto Toril, hizo balance, mostró su alegría por haber renovado dos años con el club blanco y analizó las claves del futuro del filial madridista: "Soy feliz aquí y vamos a intentar conseguir el objetivo del Castilla, que es estar en Segunda División".
Se van a cumplir cinco meses de tu llegada al Castilla, y nada más aterrizar en el club blanco declaraste que tu intención era hacer del equipo el mejor de la segunda vuelta. Primer propósito cumplido.
Creo que era un objetivo claro. Queríamos ser mejores y lo conseguimos. La pena es que la competición no hubiera durado algún partido más, porque nos hubiera permitido terminar en el primer puesto, donde las posibilidades de ascender son mayores. Hemos hecho un buen trabajo y hemos sentado las bases para el próximo año, para trabajar bien desde el principio y conseguir ese ascenso pasando por ser primeros de grupo.
Cuando llegaste en enero, ¿soñabas con que el Castilla jugara el playoff de ascenso?
El principal pensamiento era más a corto plazo. Limpiarles la mente a los jugadores, que vieran que eran buenos futbolistas e ir partido a partido. Ese era el primer objetivo, ir domingo a domingo. Conforme iba pasando la competición y las victorias iban llegando veíamos ese playoff mucho más cercano y al final lo conseguimos.
¿Qué mensaje lanzaste al vestuario para transformar la mentalidad de los jugadores?
Sobre todo que eran buenos futbolistas, que pensaran solo en ellos y que no se fijaran tanto en el contrario. Ellos son elegidos, están aquí entre muchos jugadores y han demostrado que son grandes futbolistas. Pensar en nosotros, en nuestra forma de jugar y en desarrollar lo que trabajamos durante toda la semana. En esa línea hemos conseguido grandes resultados.
Y el mensaje caló hondo porque conseguisteis sumar 19 partidos sin perder. ¿Cómo explicas el cambio tan grande entre la primera y la segunda vuelta del equipo?
Los entrenadores tenemos que intentar crear una estructura y un estilo de juego acordes a los jugadores que tenemos. Creo que los jugadores del Real Madrid Castilla tienen un talento extraordinario y todo debe estar enfocado a que ellos desarrollen en el campo lo que tienen. Y eso es tener el dominio del juego, tener el balón el máximo tiempo posible y darles, dentro de una estructura, esa libertad para que desarrollen el talento que tienen. Y gracias a todo esto las cosas han salido bien.
Y la única derrota llegó en el peor momento posible…
Es cierto. Es una pena porque muchas veces el fútbol no se corresponde con lo que tú demuestras en el campo. Creo que en la eliminatoria hemos sido muy superiores al contrario, pero el fútbol no es matemático. Muchas veces el equipo que mejor juega, o trata de hacerlo mejor, no gana, y en este caso ha sido así. Hemos hecho un fútbol bueno, a lo mejor no tan brillante como otros días, pero sí que hemos generado muchísimas ocasiones de gol que no hemos podido convertir. Creo que la eficacia ha sido determinante en esta eliminatoria.
¿Cuáles fueron las claves de la eliminatoria contra el Alcoyano?
Fue un cúmulo de circunstancias. En el partido de ida el segundo gol coincide con que Nacho está fuera y hay unos momentos de desajuste. También fuera de casa, en el segundo gol el equipo con el 1-2 se vuelca, y con una defensa de tres nos pillan a la contra. Yo creo que la clave de la eliminatoria ha sido la falta de eficacia de cara a gol. Jugadores que normalmente no fallan, no han estado acertados en ese aspecto.

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