Kaká concedió una entrevista al 'Jornal de Sao Paulo', en la que repasa la temporada ("la más difícil de mi carrera"), reitera su deseo de continuar en el Real Madrid y de volver a jugar al más alto nivel, y asegura que sus relaciones con José Mourinho son excelentes.
"A nivel personal fue la temporada más difícil de mi carrera. Colectivamente puedo decir que fue buena. Ganamos la Copa del Rey ante el Barcelona, llegamos a la semifinal de la Liga de Campeones y fuimos segundos en Liga. No es suficiente para un club como el Madrid, pero fue buena. Personalmente, fue muy difícil. Tuve la lesión, volví en enero, en marzo paré de nuevo, jugué los dos últimos meses... Fue complicado".
Preguntado sobre la posibilidad de haber pasado por el quirófano antes de las vacaciones del pasado verano, tras su participación en el Mundial, Kaká responde: "La verdad es que no quería ser operado de nuevo. Después del Mundial me hice unas pruebas en Sao Paulo y los médicos me dijeron que me tenía que operar. Cuando llegué a Estados Unidos, les enseñé ese informe a los médicos del Real Madrid y fui a una consulta en Los Angeles, en la que también me dijeron que tenía que operarme. Decidí ir a Bélgica para ver al médico que había operado a mi hermano. También era partidario de operar, así que lo hice. Hoy, viendo que no había forma de evitar el quirófano, se puede discutir si acerté o no. Pero todo eso pasó porque no quería ser operado por segunda vez".
"El dolor era constante -continúa Kaká-. Algunos días me dolía más, algunos días menos. Y por eso pensaba que podía recuperarme de la lesión con descanso, sin jugar y con un tratamiento adecuado. Pero, por desgracia, no fue así".
Kaká añade: "En el pubis no he tenido más problemas. Pero la rodilla ya no es una rodilla al 100%, porque he sido operado dos veces. Tengo que estar siempre cuidándome, siempre tratándome la articulación, haciendo refuerzo muscular...".
El brasileño asegura que en todo momento sintió y sigue sintiendo el respaldo de José Mourinho: "Cuando te operas, lo peor es la parte psicológica. Y puedo decir que Mourinho y cuerpo técnico me ayudaron mucho en ese sentido. Las dudas son constantes en tu cabeza durante la rehabilitación, porque no sabes cómo vas a volver, si vas a ser el mismo de antes...".
"Lo que no consigo es tener una continuidad, pero eso es un problema mío, no se trata de una decisión del entrenador. Necesito mantener una continuidad física durante los partidos. Hay partidos en los que estoy bien, en otros lo estoy menos. A veces me sentía volando y otras muy cansado".
"Mi esperanza es que este año voy a hacer la pretemporada con todos mis compañeros, sin tener que parar por una lesión, que es lo que necesito para comenzar bien la temporada".
El brasileño sabe que está en deuda con el madridismo: "Sé que aún no he respondido a las expectativas de la afición ni de la prensa, pero tampoco a las mías. Deseo y espero poder hacer aún muchas cosas buenas en el Real Madrid. Todo es una cuestión de confianza. Desde el momento en que me gane la confianza del entrenador, estoy seguro de que voy a jugar los partidos decisivos".
"Lo que ha ocurrido durante estos dos años en el Madrid es que aún no he alcanzado mi tope físico, técnico y psicológico. Pero esa parte es mía. Y, a diferencia de lo que se dice, Mourinho me ha ayudado mucho".
"Se dice que Mou no me quiere en el Madrid, pero no es verdad. Él ha sido siempre muy honesto conmigo, coherente en sus decisiones con respecto a mí y al equipo en general. Sólo puedo estarle agradecido".
"Mi voluntad es seguir en el Madrid. Antes de venir a Brasil, Mourinho y los dirigentes me dijeron que pasar tranquilo las vacaciones, que me esperan en pretemporada y que cuentan conmigo. Ya sabían que iba a haber muchas especulaciones, porque desde que llegué a Madrid se me ha relacionado con unos diez equipos. Pero mo deseo es seguir y voy a seguir".
Kaká admite que tiene una buena relación con Leonardo y que el actual técnico del Inter es el primero que sabe que "sólo quiero triunfar en el Madrid", y se muestra firme ante las críticas. "Acabo de cumplir 10 años como profesional y sé cómo es el fútbol. No me siento decepcionado. El día que estoy bien se habla bien, y el día que esté mal se hablará mal. En el fútbol, o no vales nada o vales mucho, son siempre opiniones muy extremas. Yo he aprendido a tener ese equilibrio, y sé cuál es mi valor".
"Para mí, es un gran desafío volver al nivel que tenía en el Milan. No tengo que demostrar nada a nadie, pwero es un reto demostrar que puedo volver a jugar como jugaba. Sin ninguna pretensión o arrogancia, porque ya he ganado todo lo que podía ganar en mi carrera, individual y colectivamente. Pero tengo una gran motivación para volver a jugar al más alto nivel".
No hay comentarios:
Publicar un comentario