André Villas-Boas se cruza en el camino de Mourinho. La relación del nuevo técnico del Chelsea con el de Setúbal actualmente es fría, inexistente, a pesar de que fue uno de sus ayudantes entre 2002 y 2009. Tal vez eso explique el porqué parece empeñado en torpedear algunos de los fichajes que Mou ha solicitado. Villas-Boas lleva días trabajando en su proyecto y ya le ha puesto sobre la mesa a Abramovich sus objetivos, curiosamente los mismos que el Madrid: Neymar, Agüero y Coentrao. Y una prioridad: Ramos.
El interés del Chelsea por el brasileño no es nuevo, pero ya se había retirado de la puja ("Mourinho ya tiene a su hombre", dijo un directivo a The Sun). Sin embargo, la llegada de Villas-Boas ha reactivado la maquinaria. Por su parte, el deseo del Kun de irse ha puesto en guardia a los blues. Ayer se especuló con una reunión con Reguera, uno de sus agentes, que estaba en Manchester. Y por último, Coentrao. Su fichaje por el Madrid estaba a punto, pero Abramo-vich, guiado por su técnico, ofrece 30 kilos; el club blanco no llega a 25...
Sueño.
Pero el joven portugués quiere ir más allá y pescar en el Bernabéu, concretamente a Sergio Ramos, a pesar de ser consciente de que el sevillano ha renovado hasta 2017.Villas-Boas fue presentado ayer por el Chelsea y ya le tiró un pellizco a Mou: "El fútbol no es un one man show, es más algo relacionado con el grupo; yo soy the group one".
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