Real Albiol.

"Somos el equipo más vertical del mundo, el campo está lleno y la gente disfruta", dijo el defensa sobre el entrenador portugués

Albiol cumple su tercera temporada en el Real Madrid y la segunda a las órdenes de José Mourinho. Una vez conquistada la Copa del Rey el curso pasado, el defensa afronta con ilusión una nueva lucha por la Liga y la Champions League. Este campeón de Europa y del Mundo con la Selección fue protagonista en el programaReal, donde explicó la evolución de la plantilla: “Es mucho más compacta, fuerte, tanto en defensa como en ataque. También ganamos en mentalidad ganadora y concentración”.

De usted destaca que siempre se está riendo...

Intento mantener la risa y ser lo más feliz, pero como todo el mundo, hay días mejores y otros tristes. Intento aprovechar la vida y disfrutar de mi trabajo, que es lo que más me gusta. Somos privilegiados por estar en el Real Madrid y disfrutar del día a día en este club. El tiempo pasa y sin que te des cuenta las temporadas se van terminando.

Usted y Arbeloa son inseparables, como dos hermanos.

Tengo buena relación con él. Lo conocí antes de la Eurocopa 2008 y ha sido como mi media naranja en el fútbol. Espero seguir muchos años con él.

Se ha ganado al vestuario muy rápido, sobre todo por su forma de ser. Es una persona muy querida por la plantilla.

Tengo grandísimos compañeros que son muy buena gente. He tenido la suerte de que me han tratado muy bien y me han abierto los brazos enseguida. Intento ser normal, como he sido siempre, respetando al que está al lado. Nunca tuve problemas en un vestuario y espero seguir así.

Además, tiene fama de buenazo…

Es importante que los compañeros hablen bien de uno y sobre todo como persona. Al principio no sabía cómo iba a ser la gente, pero luego todo me pareció fácil. Estoy muy a gusto, como en casa.

Parte de la culpa de que sea futbolista la tiene su padre.

Sí, él llegó a jugar en el Mestalla y el Sabadell de mediocentro. Mi hermano mayor también juega al fútbol y siempre ha estado la pelota en casa y son los que me han enseñado a jugar.

Su hermano mayor se llama Miguel y el pequeño Brian. ¿Es por Brian Laudrup?

Mi madre ya era mayor y fue una sorpresa que tuviera otro hijo. Mi padre nos dejó elegir el nombre. A nosotros nos gustaba mucho Dinamarca y los hermanos Laudrup. Michael es Miguel en español y fue el hermano, Brian. Tuvimos que hablar con el cura de Villamarchante, nuestro pueblo, para que nos dejara bautizarle…

¿Cuál es el mejor consejo que le han dado sus padres?

Ser humilde y seguir una línea de trabajo y regularidad, saber lo que quieres. Siempre respetando a todo el mundo y no darte por vencido. En los momentos difíciles hay que seguir y luchar y dar lo máximo. Todavía soy joven y tengo mucho que hacer.

¿Cómo era el primer campo en el que jugó?

Al principio jugaba en el pueblo y con 8 ó 9 años tuve que irme al Ribarroja, el pueblo de al lado, porque en Villamarchante no había para chicos tan pequeños. Con 12 años me hice las pruebas del Valencia y a partir de ahí...

¿Cuál era su sueño de pequeño?

Ser futbolista y jugar en Primera División. En los fines de semana me quedaba en casa viendo muchos partidos. Hacía la quiniela, con la administración de lotería de mis padres era fácil, y veía si acertaba.

¿En qué jugador se fijaba?

A mi padre siempre le gustaba Hierro. A mí también Laudrup, Zamorano, la época del Madrid que pude ver.

Ahora es conocido como defensa central pero empezó de centrocampista.

Toda mi vida hasta llegar a Primera he sido mediocentro, pero Quique me puso de central y me encontré a gusto. Me concentré en aprender y seguir mejorando de central.

El Valencia se fija en usted, le trae del Villamarchante y va subiendo escalones hasta debutar con 18 años.

Hice pruebas durante dos semanas en el Valencia. Ni dormía porque estaba muy nervioso y después me decían si me quedaba o no. Cuando llegué llevaba la camiseta de Van Bastan del Milan, las botas de Alfonso… El debut fue con Benítez. Él me subía muchos días a entrenamientos y una vez me llevó convocado a Suecia contra el AIK Solna en la Copa de la UEFA. Jugué un minuto pero fue glorioso. Era muy joven y estuve muy feliz.

¿Qué recuerda del accidente que tuvo en coche?

Tenía la presentación por la tarde con el Getafe. A mitad de camino de Valencia a Madrid me puse a leer el periódico. Me tuve que quitar el cinturón para mirar si llevaba una cosa en la mochila y luego no recordé volver a ponérmelo porque me puse a ver el diario. De repente oí un grito del conductor y un frenazo muy fuerte. A partir de ahí me quedo sin memoria, y luego lo siguiente que recuerdo es ir en el helicóptero. Tenía mucha ilusión por debutar con el Getafe, y porque tres días después tenía un partido en Alicante contra el Real Madrid y todas las estrellas como Figo, Zidane…

¿En ese mes que vivió en el hospital qué aprendió?

Aquello me dio fuerzas porque no quería ver sufrir a mis padres y a mi hermano. Quería salvar mi vida, volver a jugar al fútbol, aprendí muchísimo. La primera semana no podía recibir visitas porque estaba en la UCI. Estaba solo, piensas, maduras mucho y das importancia a cosas que en ese momento no puedes hacer y que antes no valorabas. Lo primero que hice al abrir los ojos fue preguntar si podría volver a jugar al fútbol.

¿Cuál fue la primera vez que se volvió a sentir futbolista?

En el primer mes de recuperación, por las tardes me iba yo solo a andar, estaba débil, muy delgado, y me cubría para que no me reconocieran. Me ayudaba a pensar y a darme fuerzas. El primer día que salí al césped quería hacer esprines… El primer terreno de juego que pisé fue en la ciudad deportiva del Valencia. Pesaba 65 kilos y normalmente peso más de 80. Estaba muy delgado.

Y ya con fuerza, recuperado…

Tenía ganas de volver. El primer partido en el que fui convocado con el Getafe fue en Valencia, contra el Levante. Aunque no jugué, eso ya fue un premio. Poder vivir el ambiente de un campo de Primera División. La confianza de Quique y de Fran Escribá, el segundo entrenador, fue muy importante.

Después de unos años espectaculares en el Valencia, en 2009 llama a su puerta el Real Madrid.

Fue un sueño para mí, la ilusión de cualquier niño es jugar en el Real Madrid y fichar por el mejor club del mundo. Quieres cerrarlo cuanto antes. Estaba en la concentración con la Selección en la Copa Confederaciones y en pocos días se cerró todo. Es algo importante y un paso adelante en tu carrera.

¿Qué recuerda de aquel verano de 2009?

Me levantaba y veía que un día fichaban a Cristiano Ronaldo, otro a Benzema… Tenía mucha ilusión y ganas de ponerme a trabajar para el nuevo club y compartir vestuario. Todos se portaron muy bien y luego llegaron Arbeloa y Xabi Alonso, a los que ya conocía.

¿Qué es lo que más le ha impactado del Real Madrid?

La dimensión que tiene por todo el mundo. Donde vas hay muchos aficionados y gente ilusionada, que vive para el Real Madrid. Es una responsabilidad la historia del club y formar parte de esta plantilla que es de las mejores.

¿Y este equipo de qué es capaz? Se nota la conexión entre la plantilla y la afición.

Somos el equipo que más espectáculo da, el campo está lleno todos los partidos y la gente disfrutando. Este año estamos mejor que el pasado y creo que podemos seguir dando espectáculo y consiguiendo los objetivos.

La gente dice que son el equipo que más divierte.

En pocos toques somos capaces de crear ocasiones de gol. La gente quiere eso, que en casa el equipo ataque y haga disfrutar. Creo que somos los más verticales del mundo. No hay más que ver los goles que hemos marcado en pocos segundos. Es una de las virtudes que tiene este equipo.

Llega Mestalla, un partido especial para usted.

Sí, porque soy valenciano y me he criado en la escuela del Valencia. Volver como visitante siempre es especial. En los últimos años se nos ha dado bien y ojalá se dé bien el sábado. Volver a encontrarte con gente con la que has coincidido siempre es bonito.

En ese estadio se ganó el año pasado la Copa del Rey.

Sí, lo conseguimos ante el Barcelona. Fue un día bonito, un gran partido y disfrutamos todos muchísimo. Sobre todo por ver la cantidad de aficionados que había y cómo disfrutaron.

¿Qué sensaciones le da el Real Madrid de esta temporada?

Es mucho más compacto, fuerte, tanto en defensa como en ataque. También hemos mejorado en mentalidad, el equipo sabe que el año pasado perdimos puntos importantes y que esta temporada no puede pasar. Mejoramos en mentalidad ganadora y concentración. Es el segundo año con el míster y nos conocemos todos mejor.

Dice que el equipo ha ganado en mentalidad. Esto en parte es por el entrenador: ¿qué les ha dado?

Carácter y mentalidad ganadora. Concentración, exigirnos al máximo, entrenar fuerte, estar siempre vivos y saber que si no rindes hay otro con las pilas cargadas. Eso hace que todos estén preparados y a buen nivel. Sabíamos que era un gran entrenador por lo demostrado en los equipos anteriores, pero en el día a día lo demuestra más. Esperamos conseguir los títulos y celebrarlos al final de temporada.

Pregunta Carlos que quién es para usted el mejor jugador del mundo.

Sin duda Cristiano Ronaldo. Día a día demuestra que es el más completo. Remate, cabeza, velocidad, carácter. Siempre quiere ganar y eso es lo que le hace ser el más grande y conseguir todos sus logros, tanto colectivamente como en lo personal. Siempre será un orgullo decir que compartí vestuario con uno de los mejores jugadores de la historia.

Javier, de Colombia, destaca la buena relación que tiene usted con Casillas, que siempre le nombra en las redes sociales.

Iker es algo especial. Mi primer gol en Primera se lo metí a él. Es el mejor portero del mundo y va a batir todos los récords. Conocerle como persona me ha hecho ver lo sencillo y humilde que es. Me fijo en él porque soy también bastante de pueblo y campechano. Tener la imagen de Casillas como capitán es lo mejor que le puede pasar al Real Madrid y muy positivo para nosotros.